Cómo preparar Ganache de Chocolate

La ganache, para aquellos que no lo sepáis, se trata de una mezcla de chocolate y nata. La podéis preparar con cualquier tipo de chocolate, ya sea blanco, negro o con leche. Al ser una mezcla con nata, adquiere una consistencia que es fácil de extender y una textura que es muy suave al paladar. Para mejores resultados es importante utilizar siempre chocolate de alta gama y lo ideal es que venga ya en lágrimas o trocitos regulares.

Preparar la ganache
La elaboración es muy fácil pero es importante respetar la metodología y sobretodo no sobrecalentar los ingredientes que vamos a utilizar. Hoy vamos a preparar una ganache de chocolate blanco.

ganache blanco1
Lo primero es calentar la nata, y justo cuando vaya a empezar a hervir la retiramos del fuego. En un bol de cristal (apto para microondas) tendremos el chocolate cortado en trocitos regulares. Es importante que sean trozos con tamaños similares para ayudar a que el resultado sea más homogéneo.

Añadir la nata caliente sobre el chocolate, esperar unos minutos a que se derrita y con una varilla metálica, mezclar hasta lograr que sea una mezcla homogénea.

ganache choco blanco

La ganache ha de reposar unas horas, a ser posible toda la noche y siempre a temperatura ambiente, para que adquiera una textura adecuada. No hay que tapar porque si no tiende a sudar y no se solidifica. Y tampoco debemos guardarla en la nevera. Al día siguiente, volver a mezclar de nuevo antes de utilizarla, y si está demasiado dura, calentar unos segundos al microondas.

En función del tipo de chocolate la proporción de chocolate y nata es diferente. Si preparamos una ganache de chocolate blanco, la proporción será 1 parte de nata por 3 partes de chocolate, es decir si ponemos 200 ml de nata, deberemos poner 600 gramos de chocolate blanco. Por el contrario, si queremos preparar una ganache de chocolate negro, la proporción será de 1 parte de nata por 2 de chocolate, es decir que si utilizamos 200 ml de nata, necesitaremos 400 gramos de chocolate negro. Es importante que la nata que vayamos a utilizar tenga como mínimo un 35% de materia grasa.

Para qué utilizar la ganache
Estas proporciones las utilizo normalmente cuando necesito cubrir una tarta con fondant, es ideal para poner una capa de ganache entre el bizcocho y el fondant porque tiene una textura blanda para extender, pero que se endurece lo suficiente como para ser una base firme y lisa para el fondant. Gracias a la textura de esta preparación, podréis conseguir una cobertura con esquinas bien definidas, además de que forma una capa sobre el bizcocho que permite que éste se conserve jugoso durante más tiempo.

Si lo que queremos es una ganache más ligera que nos puede servir por ejemplo, para cubrir un pastel de forma sencilla, podemos incrementar la proporción de nata y echarla caliente directamente sobre el bizcocho. Por el contrario, cuando las temperaturas suben y necesitamos una base de chocolate más dura, podemos incrementar la proporción de chocolate a la mezcla.

La ganache, además de llevar nata y chocolate, permite muchas variaciones. Podéis incorporar a la mezcla aromas como por ejemplo vainilla, frutos secos o frutas en pasta y os quedará un resultado riquísimo. Se utiliza también para rellenar bombones (con una ganache de frutos rojos por ejemplo), o para decorar cupcakes.

La ganache que más me gusta es la de chocolate negro, aunque la de chocolate blanco la utilizo a menudo porque tiene algunas ventajas en la decoración de pasteles. El chocolate blanco lo podemos teñir con colorantes especiales para chocolate y así obtener una ganache de cualquier color, por ejemplo de color rojo como ésta que os muestro en la foto.

ganache teñido

¿Qué hacer si se corta la ganache?
Que no cunda el pánico porque todo tiene solución. Si se corta la ganache, la podéis arreglar añadiendo un poco más de nata y batiendo con la ayuda de un minipimer.

Espero que os haya gustado este post y aquí os dejo una muestra de lo que podéis preparar con la ganache. En esta ocasión, he decorado unos cake pops con ganache de chocolate rojo. Estaban buenísimos y se hacen en un vuelo. Os animo a intentarlo!.

Cake pops de ganache rojo

Nota: Podéis ver un ejemplo de tarta utilizando esta cobertura aquí.